El calibrado es una parte de la configuración de los monitores que sirve fundamentalmente para dos cosas: una es lograr una reproducción fiel de color, y la otra es ajustar el brillo, contrate y gamma de la pantalla para que sean óptimos.
Generalmente, el calibrado es algo que solo hacen los profesionales de diseño que necesitan ver los tonos en pantalla con la máxima fidelidad posible a los naturales. Sin embargo, los usuarios no profesionales también pueden beneficiarse de ello, porque hace que la pantalla sea más agradable de usar, mejora la calidad de imagen y cansa menos la vista.
En algunos casos incluso ayuda a mejorar un poco la nitidez, algo que notaremos sobre todo al leer textos en pantalla.
Generalmente, el calibrado es algo que solo hacen los profesionales de diseño que necesitan ver los tonos en pantalla con la máxima fidelidad posible a los naturales. Sin embargo, los usuarios no profesionales también pueden beneficiarse de ello, porque hace que la pantalla sea más agradable de usar, mejora la calidad de imagen y cansa menos la vista.
En algunos casos incluso ayuda a mejorar un poco la nitidez, algo que notaremos sobre todo al leer textos en pantalla.
El artículo completo lo tenéis aquí:
- Cómo (y por qué) deberías calibrar el monitor de tu PC